¿Por qué Kendall Roy es uno de los mejores y más interesantes personajes de la televisión actual?

Las grandes sucesiones nunca han sido sencillas. Los traspasos de poder suelen contar con unas dimensiones que dificultan una fácil transición como tal vez fuera deseado. Adicionalmente, se originan problemáticas derivadas del inevitable encuentro de intereses de una o varias contrapartes con intereses divergentes. Unas muestran ambición por mantener lo que fue suyo durante tanto, y se resisten a perder el control. Otros presentan los mismos valores por hacerse con el poder de algo que no es directamente suyo y aspiran a poseer en pos de un beneficio eminentemente personal.

Succession (serie original de HBO) se desarrolla en Estados Unidos, y su trama versa sobre la historia de una gran empresa de telecomunicaciones que propiedad de un padre de familia de lo más exigente, duro y tradicional. Kendall Roy será un elemento central de una llamativa familia pues, siendo uno de los hijos de este gran hombre de negocios, es el mejor colocado para heredar el imperio creado por su padre.

Jeremy Strong (La gran apuesta, El juicio de los siete de Chicago) da vida al personaje, el cual ha interpretado en un total de veintinueve capítulos divididos en tres temporadas en el momento en que se escriben estas líneas. Lo que está muy claro y es fácilmente afirmable, es que los guionistas de este producto estupendo que es Succession deben de disfrutar de lo lindo escribiendo a este interesante y volátil personaje. Cabría pensar que, con todos los altibajos que ha ido sufriendo, su storyline podría haberse conformado de forma aleatoria y dando tumbos buscando el resultado más llamativo transitando constantemente de extremo a extremo. Sin embargo, va mucho más allá. El personaje cuenta con un viaje tremendamente completo y complejo, pues basándose en Kendall se habla de lo que cuesta perder algo que no era tuyo pero se te había garantizado, de lo que se puede confiar (o no) en la palabra de un sujeto cercano (por muy cercano y de confianza que pueda llegar a ser), de vivir de las rentas generadas de otro, de querer ir contra el sistema (cuando el sistema es la mano que te da de comer), de rebelarse, de tener que callarse. De humillarse, de dignificarse. De hundirse, de redimirse.

Tanto son los bandazos y tan pronunciados, que numerosas situaciones de estas son útiles como ejemplo, como enseñanza. Pocas respuestas, sin embargo, pueden extraerse. Sublevarse a un poder supremo quizá permita vivir más cómodamente, pero estando supeditado de forma constante a una presencia mayor que puede que un día deje de velar por tus intereses (si es que algún día lo hizo). Levantarse contra lo establecido y luchar por hacer lo que crees mejor en un momento determinado te dejará sin red en caso de que no sea fructífera la pelea. Y lo narrado, sorprendentemente, solo hace referencia a su vida de negocios. Si se atiende al ámbito personal del personaje, este es aún más tortuoso. Divorciado con tres hijos, con una exmujer a la que sigue amando cuando esta ya ha pasado página. Un contexto perfecto para el erigimiento de inseguridades que derivan en conductas negativas para la salud mental y corporal del propio personaje.

Un elemento creado a partir de numerosas aristas, sin ninguna estabilidad aparente y con momentos de grandeza y de caída casi repartidos a partes iguales. De él han surgido varios de los mejores conflictos y escenas de la serie en sus primeras tres temporadas, y promete que será un baluarte para el devenir de la narración.

Pese a todo, hay una cosa que nunca ha cambiado. Kendall siempre ha luchado por hacer lo que consideraba mejor, estuviese quien estuviese por delante. Inconsciencia y ambición desmedida han sido sus dos grandes pecados, pero sus motivaciones son hasta un determinado punto humanas y compartidas por muchos. Inconsciencia, para enfrentarse a cualquier enemigo por grande que sea, para combatir contra todo y no amedrentarse por nada. Ambición, para no conformase y siempre perseguir un mejor resultado, o una forma alternativa y mejor de hacer las cosas. Pecados necesarios, virtudes escondidas. Palabras, valores. Conceptos con aristas. Aristas aquellas que dibujan el contorno y circunstancias de Kendall Roy y que le hacen ser uno de los personajes televisivos más interesantes de la actualidad. Y aún tiene recorrido, pues si hay algo que jamás ha dejado de hacer Kendall es pelear.

Del mismo modo, este papel también ha estado presente en la terna de varios premios individuales desde que la serie comenzara a salir a la luz en 2018. Hasta el día de hoy, el actor natural de Boston se logró embolsar un premio Emmy en 2020 (su primera nominación) a su actuación de personaje principal en la serie. Se encuentra también nominado a la misma distinción en este caso en los Globos de Oro que se repartírán el próximo 9 de enero de 2022. Pese a que no parezca que vaya a cosechar una montaña inabarcable de éxitos individuales, lo que está claro es que se trata de una presencia digna de analizar en la televisión actual, y que aporta una entidad absolutamente indispensable a una de las mejores series que se pueden ver hoy en día.

Fuente de las imágenes: www.imdb.com

Post realizado por Diego Senso.